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miércoles, 30 de marzo de 2016
domingo, 27 de marzo de 2016
LLAVES LIBERADORAS
Llaves liberadoras
Disgusto
Cualquier contratiempo aborrece.
Sin embargo, sin disgusto, la conquista de experiencias es impracticable.
Cualquier contratiempo aborrece.
Sin embargo, sin disgusto, la conquista de experiencias es impracticable.
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Obstáculo
Todo impedimento perturba.
Sin obstáculo, pues, ninguno de nosotros consigue efectuar la superación de las propias deficiencias.
Todo impedimento perturba.
Sin obstáculo, pues, ninguno de nosotros consigue efectuar la superación de las propias deficiencias.
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Decepción
Cualquier desilusión incomoda.
No obstante, sin decepción, no llegamos a discernir lo correcto de lo equivocado.
Cualquier desilusión incomoda.
No obstante, sin decepción, no llegamos a discernir lo correcto de lo equivocado.
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Enfermedad
Toda enfermedad dificulta.
Sin la enfermedad, entretanto, es muy difícil consolidar la preservación consciente de la propia salud.
Toda enfermedad dificulta.
Sin la enfermedad, entretanto, es muy difícil consolidar la preservación consciente de la propia salud.
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Tentación
Cualquier desafío, inquieta.
Pero, sin tentación, nunca se mide la propia resistencia.
Cualquier desafío, inquieta.
Pero, sin tentación, nunca se mide la propia resistencia.
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Perjuicio
Todo golpe hiere.
Sin perjuicio, pues, es casi imposible construir seguridad en las relaciones unos con los otros.
Todo golpe hiere.
Sin perjuicio, pues, es casi imposible construir seguridad en las relaciones unos con los otros.
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Ingratitud
Cualquier insulto a la confianza daña la vida espiritual.
Sin embargo, sin el concurso de la ingratitud que nos visite, no sabremos formular ecuaciones verdaderas en las cuentas de nuestro tesoro afectivo.
Cualquier insulto a la confianza daña la vida espiritual.
Sin embargo, sin el concurso de la ingratitud que nos visite, no sabremos formular ecuaciones verdaderas en las cuentas de nuestro tesoro afectivo.
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Desencarnación
Toda muerte trae dolor.
Sin la desencarnación, no obstante, no alcanzaríamos la renovación precisa, alargando procesos menos felices de experiencia o librándonos de la vejez en el terreno de las formas.
Toda muerte trae dolor.
Sin la desencarnación, no obstante, no alcanzaríamos la renovación precisa, alargando procesos menos felices de experiencia o librándonos de la vejez en el terreno de las formas.
Comprendamos, frente a eso, que no podemos elogiar las dificultades que nos rodean, pero es imperioso reconocer que, sin ellas, eternizaríamos pasiones, engaños, desequilibrios y desaciertos, motivo por el cual será justo interpretarlas como llaves liberadoras, que funcionan en nuestro espíritu, a fin de que nuestro espíritu cambie para lo que debe ser, cambiando en sí y fuera de si todo aquello que le compete cambiar.
André Luiz
Médium Francisco Cándido Xavier
Del libro “Paz y renovación”
Traducido por Jacob
Médium Francisco Cándido Xavier
Del libro “Paz y renovación”
Traducido por Jacob
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miércoles, 23 de marzo de 2016
Síndrome de Personalidad Múltiple
Al síndrome de personalidades múltiples, Herminio Mirando en su obra "Condominio Espiritual" la define como "una comunidad de espíritus desencarnados, que comparten con un encarnado el mismo cuerpo físico.
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